Tarta de naranja sefardí con glaseado de albahaca

Lavar las 2 naranjas y ponerlas en una olla con agua, ponerles peso con un plato o similar para que las naranjas queden completamente cubiertas y cocer a fuego lento durante una hora y media. Sacar las naranjas del agua, dejarlas enfriar, cortarlas por la mitad y quitarles las semillas.Con una batidora, hacer un puré con las mitades de naranja en un recipiente alto.Separar las yemas de las claras de huevo. Batir las yemas de huevo y el azúcar con una batidora de cocina hasta que estén espumosas.Mezclar el puré de naranja con las yemas de huevo. Mezclar la levadura con la harina de almendras y añadir a la mezcla de huevo y naranja. Batir las claras de huevo con una batidora de cocina a punto de nieve e incorporarlas a la mezcla con una espátula de cocina. Verter la mezcla en un molde desmontable bien engrasado (el molde de silicona es muy adecuado) y cocer en el horno precalentado a 180° durante una hora. Si el pastel se oscurece demasiado por encima, cubrirlo con un trozo de papel de aluminio. Pasado el tiempo de cocción, retirar el pastel del horno y dejarlo enfriar sobre una rejilla. Para el glaseado, cortar la albahaca en trozos pequeños, mezclarla con el azúcar y transformarla en azúcar glas en unas 4 porciones en el molinillo de café.Mezclar el azúcar glas aromatizado con el zumo de media naranja hasta que quede suave y extiéndalo por la superficie del pastel enfriado. Servir decorado con un poco de crema, almendras tostadas y una hoja de albahaca. Conservar el pastel en la nevera.